sábado, 24 de noviembre de 2012

Saber contar

Yo siempre he sido de la idea de que las matemáticas se inventaron solo para que sepamos contar los días en los que se puede tener sexo y en los que no. ¿Por qué más iba uno a estar rompiéndose la cabeza si no para no tener que andar haciéndose responsable de tanta criatura que nazca por culpa de un carvenícola que le cogió gusto al acto reproductivo?

Acá no venga a pensar usted que los greñudos de las cavernas inventaron los números para buscar formas equitativas de distribución de alimentos ni ninguna de esas vainas. Las matemáticas no se crearon para andar encontrando puntos de tensión en represas que después sirvieron para germinar los campos ni mucho menos. El hombre de cromañón lo que quería era culear sin tener que hacerse responsable de ningún niño. Lo que nos dice que eso de a evolución puede estar un poquito equivocado. ¿O acaso usted no anda buscando lo mismo que el tipo de las cavernas?

Para bien o para mal, ese ímpetu por el placer ha hecho que avancemos mucho como raza; es más la raza humana no sabe todo lo que le debe al sexo. Desde las matemáticas hasta la medicina. Porque toda la sociedad es una respuesta sexual.

Uno va por la vida sin entender que los doctores nacieron gracias a que un tipo andaba muerto de ganas por una mujer que no le daba bola y que tuvo que buscar la forma de extender su vida lo suficiente para tener la oportunidad de comérsela. Después vino todo eso del juramento hipocrático y la misión esa de curar dolores. No se engañe.

Uno no entiende que la mecánica automotriz se creó porque había una tipilla por la que un sujeto moría. La señorita vivía muy lejos por lo que hubo que buscar la forma de ir hasta donde ella estaba, llegar fresco, no cansado por la caminata porque después 'no poder rendir la hora de la hora' a. Así fue que hubo que inventar carros.

No entiendes que antes hubo un tipo descontento con su cuerpo y que debía tapar sus defectos con algún tipo de aditamento que lo haga verse bien. Así nació la ropa, la moda y toda esa mierda que le encanta a la gente.

Uno puede encontrarle la 'raíz sexual' a toda actividad del mundo. Es solo cuestión de abrir y los ojos.

Las rutas marítimas se trazaron porque los europeos se cansaron de la carne de nalga blanca y se fueron a buscar la piel trigueña de la mulata caribeña. Lo de la colonización vino después.

Pero antes de que piense mal de mi, no crea que yo soy un machista que anda diciendo que todo lo bueno que ha dado la humanidad es responsabilidad de los hombres. Lo que yo quiero que usted razone es que, es obvio, el género masculino, por sexo, se desespera y hace lo impensable por conseguirlo, incluso ir a la luna. Y esto es verdad, hay más hombres que mujeres indagando en cada rama de la sociedad presionando para seguir consiguiendo sexo. Y ¿sabe cómo yo sé que esto es cierto? Porque la cura para la impotencia se encontró mucho antes que la del cólico menstrual.

Usted recuerde, piense no más que es lo más desesperado que ha hecho por llevarse alguien a la cama. Y esta reflexión la invito a hacerla a ambos géneros. Esto es porque el sexo mueve al mundo.

El coito se nos ha subido tanto a la cabeza que nos olvidamos que para conseguirlo de formas responsables y seguras hubo que avanzar mucho como raza (si no mire todos los ejemplos arriba mencionados). La cópula, el placer, se nos perfila hoy como la única meta, olvidando que, por ejemplo, todo nació de saber como contar los día para entender cuando es que se puede ir a culear en paz.

Pero ya nada de esto importa, es más, de que se lo haya dicho a un buen amigo mío que, la semana pasada, descubrió que hubiese sido bueno prestar atención en las clases de matemáticas y así ahorrarse los próximos 18 años de deudas paternales. 

3 comentarios:

  1. Y las putas?! no se me olvide de las putas!

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  2. Yo escribi una cancion con temas similares a los que toca en su post. Que habria inventado Picasso? le leo y creo q tengo competencia. Sera usted mi digno sucesor?

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